Las enfermedades más comunes en el verano que vamos a enumerar en este artículo se deben a las altas temperaturas en esta época del año, al igual que la exposición solar que es más común hoy en día. Descubra los principales síntomas y formas de tratamiento, así como algunos consejos útiles para prevenir estas patologías.
Aquí están las 6 enfermedades más comunes durante el verano.
1. Quemaduras solares
En verano, es común exponerse al sol y, si no se ha protegido, esto puede provocar quemaduras caracterizadas por enrojecimiento, calor o incluso ampollas en la piel. En estos casos, debe aplicar cremas adecuadas.
En situaciones más graves que pueden progresar a deshidratación, insolación, dolores de cabeza, mareos y aumento de la frecuencia cardíaca, debe hidratarse y buscar atención médica.
Cómo evitarlo:
La exposición solar debe hacerse gradualmente. Además, debe tener en cuenta el tono de la piel y utilizar una protección solar adecuada. También es importante evitar exponerse al sol durante las horas en que los rayos UV son más intensos, es decir, entre las 11 a.m. y las 5 p.m.
2. Deshidratación
La deshidratación es una de las enfermedades más comunes durante el verano y es más común en niños y ancianos. Las principales señales son letargo y somnolencia. Para casos más graves, esto puede conducir a un paro cardíaco o coma. La solución a este problema es tomar líquidos o buscar el consejo de un médico si la situación empeora.
Cómo evitarlo:
Durante los períodos de calor, la hidratación es aún más importante. Para esto debes ingerir entre 2.5 y 3 litros de agua por día. Verifique el color de la orina para comprender cuáles son sus necesidades. La orina oscura puede significar que su cuerpo necesita agua.
3. Otitis
Bucear en la piscina y en el mar mantiene las orejas siempre húmedas, lo que puede causar infecciones del oído. Dolores de oído o fiebre son algunos de los síntomas de esta enfermedad.
En caso de otitis, debe consultar a un médico para resolver el problema. La otitis se puede tratar con limpiadores, gotas, descongestionantes, audífonos o antibióticos.
Cómo evitarlo:
Limpie las orejas con frecuencia, pero con una toalla y no con un bastoncillo de algodón (para no empujar la cera hacia adentro), esta es una forma de prevenir infecciones del oído que siempre surgen en un ambiente húmedo y que favorecen la proliferación de hongos y bacterias.
4. Conjuntivitis
El clima de verano, más húmedo y cálido, facilita la proliferación de la conjuntivitis. Esta patología se caracteriza por un ojo rojo, el párpado hinchado que llora y, puede o no, apestar. Esta enfermedad puede ser viral y pasar de un ojo a otro, o ser bacteriana e infectar ambos ojos simultáneamente.
Para terminar con este problema, puede aplicar compresas congeladas en los ojos, antibióticos (en el caso de la conjuntivitis bacteriana) y gotas para los ojos antiinflamatorias (para situaciones más graves).
Cómo evitarlo:
Para evitar este problema, debe apostar por una buena higiene de las manos, lavarlas con frecuencia y evitar frotarse los ojos.
5. Intoxicación alimentaria
Fiebre, malestar, diarrea, náuseas, vómitos, distensión abdominal y cólico pueden ser un signo de intoxicación alimentaria, una ocurrencia común durante el verano, porque las temperaturas son altas y esto puede contribuir al deterioro de los alimentos.
Para tratar este problema, generalmente se prescriben medicamentos sintomáticos o, que tratan la intoxicación alimentaria. Además, la hidratación es fundamental, especialmente cuando los síntomas de intoxicación están presentes. En algunos casos, el apoyo médico puede ser necesario.
Cómo evitarlo:
Prevenir la ingestión de alimentos contaminados con microorganismos es verificar la fuente de los alimentos y evitar comer en algunos lugares donde el embalaje de los productos alimenticios parece dudoso.
6. Micosis
Hay dos tipos comunes de infecciones fúngicas durante el verano: la pitiriasis versicolor causada por hongos que causan marcas blancas o más oscuras, especialmente en los hombros, la espalda y el torso y dermatofitosis, más común en los niños y puede ocurrir manifestar en cualquier parte del cuerpo.
Un problema común es el famoso pie de atleta y la congelación entre los dedos. Estas micosis pueden causar descamación, grietas en la piel, picazón y olores fuertes. Para tratar las infecciones por hongos, es común recetar cremas, ungüentos o lociones antimicóticas.
Cómo evitarlo:
La contracción de estos hongos se debe normalmente al contacto con lugares contaminados. Sin embargo, para prevenir infecciones fúngicas, debe usar chanclas de goma en áreas públicas (como piscinas), secarse los pies (especialmente entre los dedos de los pies) y otras áreas del cuerpo, como zarcillos y axilas, cambiar diariamente. calcetines y ropa interior, evite compartir su ropa y accesorios de higiene, mantenga las uñas cortas, airee regularmente los zapatos y use ropa ligera y preferiblemente de algodón.